Si estás exageradamente
alegre sin ningún motivo, cuidado porque, según la medicina china, puede haber
un exceso en la energía del corazón. Digo alegría, no felicidad ya que esta
última puede ser infinita sin ningún problema. Si además de estar demasiado
alegre, hablas mucho, con mayor motivo puede ser el corazón.
Si estás deprimido/a,
malhumorado/a o enojado/a sin entender por qué y estás buscando algún culpable
por sentirte así, cuidado porque puede haber un problema con la energía del
hígado. Te sientes deprimido cuando hay una insuficiencia y enojado cuando hay
un exceso. También puedes sentir ambas cosas alternativamente y es cuando te
dicen que eres “bipolar”, en Medicina china se dice que es un estancamiento en
la energía del Hígado o de la vesícula biliar.
El miedo sin motivo indica
un desequilibrio en la energía del Riñón. Si hay pánico extremo, también sin
motivo, puede haber una insuficiencia de Yin de Riñón.
Si estás muy triste y no
sabes por qué, puede haber un desarreglo en la energía de los Pulmones.
La ansiedad, un estado
emocional tan común hoy en día, puede deberse a un desequilibrio en cualquiera
de los órganos, tanto por exceso como por deficiencia de su energía.
Los estados de ansiedad se reflejan
en la lengua con una punta roja y por una línea profunda que la recorre en todo
su largo dividiéndola en dos. Si tienes estos signos en tu lengua, debes
resolver tu estado de ansiedad urgentemente porque puede derivar en un ataque
al corazón.
Las emociones pueden estar
causadas por desequilibrios energéticos en los órganos, pero también al revés,
las emociones que permanecen mucho tiempo sin resolver pueden provocar daño
físico al cuerpo.
El cuerpo nos avisa cuando
algo va mal a través del dolor, de las emociones, del color de la piel,
ronchas, etc. Si no atendemos estos avisos y por el contrario los suprimimos
con calmantes para el dolor, tranquilizantes o excitantes, cremas, etc.
entonces nos enfermaremos realmente y tendremos que ir al médico.
Cuando surge algo que
no es normal en nuestro cuerpo, lo primero que debemos hacer es preguntarnos
qué ley de la naturaleza hemos violado; qué hemos comido y nos hizo mal;
tenemos que ver si estamos estreñidos, si estamos orinando regularmente; si hay
problemas en nuestro trabajo o en nuestra vida familiar que nos estén
afectando.
Cuando descubramos la causa y la evitemos, la mitad del problema estará resuelto. Luego buscaremos cómo remediar nuestra situación por medios naturales: plantas medicinales para el estreñimiento, la ansiedad, etc; acupuntura o digitopuntura, hidroterapia, ejercicios, etc.
Cuando descubramos la causa y la evitemos, la mitad del problema estará resuelto. Luego buscaremos cómo remediar nuestra situación por medios naturales: plantas medicinales para el estreñimiento, la ansiedad, etc; acupuntura o digitopuntura, hidroterapia, ejercicios, etc.